La Estimación y Evaluación del Creyente de la Salvación Plena de Cristo

 

La Estimación y Evaluación del Creyente de la Salvación Plena de Cristo

Fil. 3:7–8 – Conocer a Cristo es el tesoro supremo.

Salmo 118:22: «La piedra que desecharon los constructores se ha convertido en la piedra angular».

1 Pedro 2:4: «Se han acercado a Él, piedra viva, desechada por los hombres, pero escogida por Dios, preciosa».

Mateo 10:37-38: «El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; y el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y me sigue, no es digno de mí».

Jeremías 15:19: «Así dice el Señor: «Si separas lo precioso de lo indigno, entonces serás mi boca...».

 

Categoría	La Estimación y Evaluación del Creyente de la Salvación Plena de Cristo
Significado	Los valores de los creyentes son transformados: lo que antes era tesoro ahora es pérdida; Cristo y Su salvación se convierten en el tesoro supremo (Fil. 3:7–8; 1 Co. 1:18).
Razón	Dios valora la realidad interna, no la apariencia externa (1 S. 16:7). Los valores equivocados—comoq enfocarse en lo exterior y descuidar la justicia y la misericordia—son condenados por Cristo (Mt. 23:16–26).
Método	(1) Medir todo por Cristo (Mt. 6:33). (2) Escoger a Cristo sobre los beneficios terrenales (Job 22:23–28; Mt. 10:37–38). (3) Separar lo precioso de lo vil (Jer. 15:19). (4) Crecer en el conocimiento de Cristo por encima de todas las cosas (Fil. 3:8; 2 Pe. 3:18).
Ejemplos	- La piedra rechazada llegó a ser la piedra angular (Sal. 118:22; 1 Pe. 2:7). - Pablo contó todo como pérdida para ganar a Cristo (Fil. 3:7–8). - Job escogió a Jehová sobre el oro y la plata (Job 22:24–26). - Los discípulos dejaron todo para seguir a Jesús (Lc. 18:28–30).
Aplicación	- Valorar a Cristo por encima de la familia (Mt. 10:37–38). - Valorar la justicia de Cristo más que los tesoros terrenales (Job 22:23–28). - Valorar el conocimiento de Cristo sobre todas las cosas (Fil. 3:8). - Buscar primeramente el reino de Dios (Mt. 6:33). - Ver la Nueva Jerusalén como la estructura preciosa final de Dios y el hombre (Ap. 21:18–21).
Escrituras Relacionadas	- Mt. 23:16–26 – Jesús reprende a los líderes ciegos por valores equivocados. - 1 S. 16:7 – Dios mira el corazón, no la apariencia. - Lc. 16:15 – Lo que los hombres estiman es abominación para Dios. - Lc. 9:54–56 – El Señor reprende el espíritu equivocado de los discípulos. - 1 Pe. 3:4 – El hombre interior del corazón es precioso. - Fil. 3:7–8 – Conocer a Cristo es el tesoro supremo. - Sal. 118:22 – La piedra rechazada llegó a ser la piedra angular. - 1 Pe. 2:4–7 – Cristo es la piedra viva, preciosa para Dios. - Mt. 10:37–38 – Amar a la familia más que a Cristo hace uno indigno de Él. - Lc. 18:28–30 – Los que dejan todo por Cristo reciben bendición multiplicada. - Job 22:23–28 – Rechazar el oro y escoger a Jehová trae oración contestada y luz en el camino. - Is. 42:1–4; Mt. 12:18–21 – Cristo es el siervo escogido en quien Dios se deleita. - 1 Pe. 1:18–20 – La redención es por la sangre preciosa de Cristo, no por oro o plata. - 2 Pe. 1:2–3, 8; 2:20; 3:18 – Crecimiento en el conocimiento de Cristo. - Ap. 21:18–21; 1 Co. 3:12 – La Nueva Jerusalén edificada con materiales preciosos. - Mr. 9:7–8 – “Oídle”—Cristo es la porción del creyente. - 2 Co. 4:7 – Tesoro en vasos de barro. - 1 Pe. 1:8 – Amando a Cristo sin haberlo visto, con gozo inefable.

 

Contenido

La Biblia muestra que los valores del creyente son transformados por la salvación. Lo que antes era considerado precioso en el mundo ahora se ve como pérdida en comparación con Cristo. El verdadero cristiano estima a Cristo y Su plena salvación por encima de todas las cosas.

Puntos Claves

1.      El sistema de valores del creyente debe cambiar después de la salvación.

2.      Cristo, despreciado por los hombres, es escogido y precioso para Dios (Sal. 118:22; 1 Pe. 2:7).

3.      La verdadera medida del valor se basa en conocer a Cristo (Fil. 3:7–8).

4.      Este cambio de valores se prueba en las elecciones entre Cristo y los tesoros mundanos, las relaciones o las ambiciones.

5.      La visión final es la Nueva Jerusalén, una estructura de materiales preciosos que significa al Dios Triuno trabajado en Su pueblo redimido (Ap. 21:18–21).

Conclusión:

La estimación y evaluación del creyente de Cristo y Su salvación marcan un cambio radical de valores. Lo que el mundo rechaza, el creyente lo atesora. Conocer y ganar a Cristo es el valor supremo. Un sistema de valores transformado capacita al creyente para escoger a Cristo en toda situación, amarlo por encima de la familia y las riquezas, y ver la Nueva Jerusalén como la consumación de la salvación de Dios.

 

*Consulte el tema general de la capacitación de verano de junio de 2025: Experimentar, disfrutar y expresar a Cristo (Parte 3), capítulo 9: La visión, la experiencia, el disfrute y la expresión del tesoro supremo de Cristo para la vida genuina de la iglesia.